¿Listo/a para comenzar la alimentación complementaria? Solid Starts Compass℠ es la experiencia guiada de nuestra app que te ayudará con los primeros bocados y mucho más.
Hemos creado una base de datos específicamente para esto. Busca un alimento para ver su información nutricional, cómo cortar y servir ese alimento a bebés y niños(as) pequeños(as) según su edad, y una receta gratuita con cada alimento. La base de datos también está disponible como una aplicación móvil, puedes descargarla en iPhone oAndroid.
No hay una respuesta simple para esta pregunta, todo depende de lo que necesites. Por eso hemos escrito esta guía detallada de sillas altas/tronas.
Hay muchas opiniones sobre el consumo de agua para recién nacidos(as), bebés y niños(as) pequeños(as). Según la Academia Estadounidense de Pediatría, se pueden ofrecer pequeñas cantidades de agua a partir de los 6 meses, siempre y cuando el/la bebé esté creciendo y aumentando de peso adecuadamente, pero el agua es opcional antes de los 12 meses de edad. Puedes encontrar respuestas detalladas a todas tus preguntas sobre la ingesta de agua, los diferentes tipos de agua y cómo introducir agua en nuestro detallado artículo sobre el agua.
Recibimos muchas preguntas sobre lácteos, leche de vaca, leche de almendras, leche de soya, leche descremada, alergias a la leche, etc. así que decidimos crear una Página de preguntas frecuentes sobre la leche.
El sodio es un nutriente esencial que nuestros cuerpos necesitan en pequeñas cantidades para regular los fluidos en nuestra sangre y para alimentar nuestro sistema neurológico. Demasiada sal puede no ser saludable para los(as) bebés, por lo que es importante saber cuánta sal puede agregar de manera segura a la comida del/a bebé. Encuentra la respuesta a esa y más preguntas sobre la sal en nuestro artículo sobre el sodio.
Existen infinitas posibilidades cuando se trata de vasos, pero solo hay dos vasos que realmente necesitas:
Vaso abierto
Vaso con popote/pajita
Tenemos información sobre cómo enseñarle al/a bebé a beber de un vaso, qué hacer si el/la bebé no parece interesado(a) (o tira todo el líquido en el piso) y más en nuestra página sobre el sodio y los(as) bebés.
Hay muchas razones por las que el/la bebé podría no estar interesado(a) en la comida, pero descubrir qué está pasando realmente puede ayudarte a saber si debes esperar, tomar medidas o buscar más ayuda. Nuestra página con estrategias para ayudar al/a bebé tiene más detalles sobre posibles escenarios e instrucciones por edad.
No. Un estudio de control aleatorio, a menudo conocido como el “estudio BLISS” demostró que los(as) bebés no tenían más probabilidades de ahogarse cuando se alimentaban con bocados apropiados cuando se comparan a los bebés que se alimentaban con cuchara. Este estudio también confirmó que el riesgo disminuye cuando el/la bebé se alimenta solo(a) lo que se ha investigado a fondo en la población adulta. En nuestra extensa experiencia clínica, hemos viso que los(as) bebés que aprenden a alimentarse independientemente una variedad de texturas desde temprano suelen convertirse en comensales mas hábiles y tienen menos probabilidades de ahogarse o batallar con la comida conforme crecen y comienzan a comer alimentos mas desafiantes con menor supervisión. Al igual que practicar caminar y escalar ayuda a desarrollar el balance del/a bebé con el tiempo, nosotros creemos que tratar de comer una variedad de alimentos ayuda a desarrollar sus habilidades de masticación con el tiempo.
Por lo general, los seis meses de edad son el indicador de cuando un(a) bebé sano(a) y nacido(a) a término está listo(a) para comer sólidos, desde el punto de vista del desarrollo. Alrededor de esta edad, los(as) bebés pueden sentarse sin apoyo, controlar el movimiento de la cabeza, poner atención y demostrar interés a una actividad y llevarse la comida a la boca con precisión. Cada bebé se desarrolla a su propio ritmo, pero es raro ver bebés de 4 o 5 meses que demuestran todas estas habilidades.
La respuesta sencilla es sí. El BLW es una forma de empezar a ofrecer alimentos sólidos a los bebés dejándoles alimentarse solos desde el principio. Usualmente se le considera un sinónimo de 'finger foods' o alimentos en bocados. Sin embargo, nuestra opinión es que los bebés que aprenden a alimentarse solos, se benefician de una amplia variedad de texturas y consistencias de alimentos, incluyendo los purés o papillas. ¡Incluso las personas adultas comemos purés y alimentos blandos como hummus y yogur! Los bebés pueden alimentarse solos usando cucharas pre-cargadas. Si optas por darles una bolsita de papilla al/a bebé, puedes fomentar la alimentación independiente dejando que el/la bebé sostenga la bolsita por sí mismo(a).
Sí. Si bien técnicamente el término "BLW" se refiere a comenzar la alimentación complementaria permitiéndole al bebé alimentarse solo. Todos los bebés deben hacer la transición a alimentos masticables en algún momento durante su proceso de alimentación complementaria. Entonces, incluso si comienzas con alimentación con cuchara, tu bebé debe aprender a comer bocados de comida de forma independiente. La forma más segura para que un(a) bebé coma bocados de comida es alimentándose de forma independiente (el riesgo de ahogamiento aumenta cuando los(as) cuidadores(as) ponen bocados de comida directamente en la boca del/a bebé), por lo que cuando el/la bebé hace la transición a bocados, es importante dejar que el/la bebé sea el que lleve el control y se alimente a sí mismo(a). Una vez que comiences a ofrecer bocados (independientemente de la edad del/a bebé), considera comenzar ofreciendo las presentaciones de 6 meses o más, ya que son más fáciles de llevar a la boca y de manipular para los(as) comensales novatos(as). (Consulta nuestra base de datos gratuita First Foods® para obtener más detalles). Además, consulta nuestro curso virtual De purés a bocados para obtener más consejos sobre esta transición.
Primero, consulta con tu pediatra para asegurarte de que la reacción no indica un problema mayor, como una reacción alérgica, SEIPA, o reflujo. Otras razones por las que los(as) bebés vomitan durante o después de una comida incluyen que estaban muy llenos(as) al comenzar la comida (por ejemplo cuando la comida se ofrece demasiado cerca de una toma de leche materna/humana o fórmula) o después de tener arcadas. Si sospechas que el/la bebé vomitó porque estaba demasiado lleno(a) de leche, espera al menos una hora después de amamantar o dar biberón al/a bebé antes de ofrecerle alimentos sólidos. Si te parece que el/la bebé vomita mucho mientras come o si algo te preocupa, habla con tu pediatra. Para obtener más información acerca de las arcadas, qué son y qué no son, consulta nuestra página de arcadas.
¿Alguna vez has intentado comer desde un taburete alto sin reposapiés? ¿Con las piernas colgando? Además de ser incómodo, tener las piernas colgando afecta la estabilidad del torso del/a bebé. La fuerza del torso les da a los(as) bebés la base estable que necesitan para concentrarse en desarrollar movimientos dinámicos y complejos de los dedos y la lengua mientras aprenden a alimentarse por sí mismos(as). La posición adecuada mientras come (sentado(a) totalmente erguido(a), con las caderas en un ángulo de 90 grados, los pies apoyados) no solo aumentará la cantidad de tiempo que los(as) bebés están dispuestos(as) a permanecer sentados en su silla alta, sino que también disminuirá el riesgo de ahogamiento.
Las cosas más importantes que debes buscar en una silla alta incluyen una posición erguida, sin inclinarse hacia atrás en absoluto, y un reposapiés ajustable que sostiene los pies y las piernas del bebé para que sus caderas estén en un ángulo de 90 grados. También es importante tener una bandeja desmontable para que puedas acercar la silla del bebé a la mesa. Lee sobre nuestras recomendaciones en nuestra guía detallada de sillas altas/tronas o ve nuestro video aquí para toda la información sobre sillas altas/tronas.
En general, para los bebés de 6 a 12 meses, debes concentrarte en alimentos ricos en hierro, proteínas y con alto contenido nutricional. También es importante que la comida pueda prepararse o modificarse de una manera que sea fácil de agarrar y segura de consumir a esta edad. Consulta nuestras guías para conocer los mejores y peores alimentos para bebés o visita nuestra base de datos First Foods®.
Para obtener más información sobre los tamaños de alimentos apropiados para cada edad y cómo modificar los alimentos para que los(as) bebés se alimenten por sí mismos de manera segura, consulta nuestra sección sobre Tamaños y formas de alimentos para bebés.
Siempre y cuando le des prioridad a la alimentación por sí mismo, nuestra opinión es que los bebés se benefician de una amplia variedad de texturas y consistencias de alimentos, incluido el puré o la bolsita ocasional. Si optas por servir una bolsita de papilla a la hora de comer, puedes fomentar la alimentación independiente dejando que los bebés la sostengan solos.
No. Es un error pensar que los(as) bebés necesitan dientes para comer. ¿Sabías que los dientes que usamos para masticar (nuestros molares) no salen hasta mucho después del primer cumpleaños? Los bebés pueden masticar y moler la comida con sus encías. Asegúrate de revisar alimentos que no son seguros para bebés antes del primer cumpleaños, así como los peligros comunes de ahogamiento.
Creemos que al dejar que tu bebé se alimente solo y servirle la comida familiar desde el principio y de manera constante, usualmente ayuda a que las comidas sean más placenteras en el futuro. El BLW puede crear una base sólida para la alimentación. No es una poción mágica contra las fases de selectividad, que atraviesan muchos bebés alrededor de los 18 a 36 meses de edad, pero los hábitos alimenticios (para el niño y los padres) desarrollados en esos primeros días de comenzar con sólidos ayudarán a las familias a navegar las fases quisquillosas rápidamente.
El/la bebé está listo(a) para comenzar con alimentos sólidos cuando puede sentarse erguido(a) con mínimo soporte, controlar los movimientos de la cabeza, aplicar sus habilidades motoras para llevar la comida a la boca con precisión y expresa interés en alimentarse por sí mismo(a). Estos hitos del desarrollo generalmente se alcanzan alrededor de los 6 meses de edad. La mejor manera de "saber" es comenzar a traer al/a bebé a la mesa alrededor de los 5 meses y dejarlo(a) sentarse en tu regazo mientras comes. Si el/la bebé puede mantener la cabeza erguida todo el tiempo, observar cómo comes e intentar agarrar la comida, ¡esto indica que probablemente está listo(a) para comenzar con sólidos! ¿Necesitas más información? Visita nuestro artículo sobre señales de que está listo(a).
Primero, es importante distinguir la diferencia entre arcadas y ahogamiento. El verdadero ahogamiento ocurre cuando las vías respiratorias están obstruidas y hay problemas para respirar. Los signos de que un bebé se está ahogando incluyen la incapacidad para llorar, la dificultad para respirar, pulmones que se contraen, sonidos agudos y cambios de color de piel que pueden variar de tonos azules o morados a cenizos. La mayor parte del tiempo, el ahogamiento es silencioso y el/la bebé se ve aterrorizado. Si sospechas que se está ahogando, llama al número de emergencias de inmediato y realiza primeros auxilios apropiados para su edad.
Para obtener más información, consulta nuestra sección de Seguridad y familiarízate con la lista de peligros comunes de ahogamiento y descarga nuestra Guía de rescate de bebés. Además, lee sobre las arcadas para comprender la diferencia entre arcadas y ahogamiento.
Sí. El verdadero ahogamiento ocurre cuando las vías respiratorias están obstruidas y hay problemas para respirar. Los signos de que un bebé se está ahogando incluyen la incapacidad para llorar, la dificultad para respirar, pulmones que se contraen, sonidos agudos y cambios de color de piel que pueden variar de tonos azules o morados a cenizos. La mayor parte del tiempo, el ahogamiento es silencioso y el bebé se ve aterrorizado. Si sospechas que se está ahogando, llama al número de emergencias de inmediato y realiza primeros auxilios apropiados para su edad.
Las arcadas son un reflejo protector que provoca la contracción de la parte posterior de la garganta. Es una función natural y protege del ahogamiento. Cuando esto sucede, es importante dejar que bebé procese la comida por sí solo y evitar meter el dedo en la boca, lo que puede empeorar la situación.
Para obtener más información sobre ahogamiento, visite nuestra sección sobre arcadas o ahogamiento y familiarízate con la lista de peligros comunes de ahogamiento.
En términos generales, los(as) bebés comen "lo suficiente" cuando muestran lo siguiente: tiene períodos consistentes de tiempo donde están contentos(as), alertas y juguetones(as); así como períodos de sueño que duran varias horas; orinar varias veces al día; hacer popó a diario o cada pocos días; explorar enérgicamente su entorno; aprender nuevas habilidades; y en constante crecimiento.
En el primer año de vida, la principal fuente de nutrición debe ser la leche materna o la fórmula, complementada con alimentos sólidos densos en nutrientes alrededor de los 6 meses de edad. Durante esta fase, recuerda que aprender a comer alimentos sólidos lleva tiempo; a menudo seguirán consumiendo aproximadamente el mismo volumen de leche materna o fórmula. Así como no esperaríamos que un bebé que está aprendiendo a caminar, camine junto a nosotros, no debemos esperar que un bebé que está aprendiendo a saborear, explorar y masticar alimentos sólidos, ingiera estos alimentos de manera eficiente al principio. Ellos son increíblemente buenos para regular su apetito y comunicar señales a los padres que tienen hambre o están llenos. El bebé debería estar comiendo lo suficiente si le ofreces alimentos sólidos dos o tres veces al día (y después de los 12 meses, tres comidas + dos refrigerios al día) mientras también ofreces leche materna o fórmula hasta alrededor de los 12 a 15 meses de edad.
Los alimentos sólidos deberían empezar a convertirse en la principal fuente de nutrición alrededor de los 12-15 meses de edad. Usualmente los alimentos sólidos se convierten en la principal fuente de nutrición entre los 18-24 meses de edad, cuando las tomas de leche se acaban o se vuelven menos frecuentes, siendo más enfocadas al confort y a un pequeño refuerzo nutricional más que por una necesidad calórica. Recuerda que muchos bebés son capaces de dejar por completo las tomas de leche materna de pecho o biberón entre los 12-15 meses de edad y solamente consumir alimentos sólidos, pero muchos otros bebés necesitarán una transición más gradual durante el transcurso del segundo año para remplazar por sólidos la leche materna y ambos escenarios son completamente normales. En lugar de preocuparte por el consumo de sólidos a los 12-15 meses, este es un buen momento para poner más atención a la cantidad y motivar al bebé a consumir más alimentos, modificando su horario de alimentación para que participe de la comida familiar con más frecuencia, y reduciendo de manera gradual la cantidad de leche que se ofrece durante el día o noche.
Para los 10-12 meses de edad, el/la bebé debería explorar de manera activa e intentar alimentarse de sólidos. Si para este entonces no está demostrando interés o se reúsa a sentarse a la mesa para comer, es un buen momento para hablar con el proveedor de salud del/la bebé y considera solicitar una consulta con un terapeuta ocupacional pediátrico o patólogo de habla y lenguaje para que te ayuden a descifrar qué está pasando. Si el/la bebé sí está explorando alimentos pero sigue consumiendo (tragando) cantidades mínimas de alimentos sólidos para los 12-15 meses, empieza por revisar su horario de alimentación, y de manera muy gradual, reduce la cantidad de tomas de leche o fórmula que ofreces durante el día para ver si esto motiva a tu bebé a consumir más a la hora de comer. Si para los 15 meses sigue consumiendo cantidades mínimas de alimentos sólidos, a pesar de haber modificado de manera gradual la cantidad de tomas de leche durante el día, ahora es un buen momento para hablar con el proveedor de salud de tu bebé y solicitar una consulta con un terapeuta ocupacional pediátrico o patólogo de habla y lenguaje, quien pueda evaluar las habilidades orales motoras de tu niño(a) pequeño(a) y asegurarse que todo esté en orden.
Balancear las tomas de pecho o biberón en torno a las comidas sólidas depende en gran medida de la edad del/a bebé y de cuánto tiempo ha estado comiendo sólidos.
A muchos(as) bebés entre 6 a 8 meses de edad que comienzan con alimentos sólidos les va bien con una toma breve de pecho o biberón antes y después de una comida sólida. Esto evita que tengan demasiada hambre y se sientan frustrados(as) en la mesa y ayuda a llenar su barriga después de trabajar duro para explorar y aprender a comer alimentos sólidos. Sin embargo, si el/la bebé tiene muchas arcadas, escupe, o vomita, evita el refrigerio antes de las comidas y ofrece el pecho o el biberón después, aproximadamente una hora después de la comida sólida.
Alrededor de los 8-10 meses de edad y después de practicar el consumo de alimentos sólidos durante 2-3 meses, la mayoría de los(as) bebés ya no necesitan la toma de pecho o biberón antes de una comida sólida. A esta edad y etapa, la mayoría de los(as) bebés están listos(as) para que el apetito sea un motivo para explorar y comer en la mesa. Sin embargo, una toma de biberón o pecho después de las comidas puede ayudar.
Cuando el/la bebé alcance los 12 meses de edad, deja al menos una hora entre las tomas de pecho o biberón y las comidas sólidas para fomentar una mayor ingesta de alimentos sólidos en la comida.
Sí, en realidad es bastante común (y completamente normal) ver trozos de comida parcialmente digeridos en el popó del/a bebé. Los alimentos sólidos pueden pasar con bastante rapidez a través del tracto digestivo de un(a) bebé. Cuánto más rápido viaja la comida, menos tiempo tiene para ser digerida por completo. Algunos otros factores, como jugos y antibióticos, pueden hacer que los alimentos se muevan rápidamente a través de los intestinos y también pueden causar popó muy suelto con pedacitos de comida. Además, recuerda que el/la bebé está desarrollando sus habilidades para masticar en esta edad. Esto también puede resultar en ver trozos de zanahorias, brócoli, arándanos azules entre otros en el popó. En general, mientras el/la bebé esté creciendo sano(a), esto no es preocupante. Si observas alimentos sin digerir constantemente en la popó del/a bebé y/o si el/la bebé tiene dificultad para aumentar de peso, te recomendamos encarecidamente que consultes con el/la proveedor(a) de atención médica del/a niño(a).
Los bebés nacen con un reflejo de empuje de la lengua, lo que significa que sus lenguas empujan cosas como la comida hacia adelante y fuera de la boca. También han pasado los primeros meses de su vida moviendo la lengua hacia adelante y hacia atrás para amamantar o tomar leche del biberón, ¡así que esos músculos de la boca son bastante fuertes! A medida que aprenden a masticar y tragar, comienzan a ejercitar diferentes músculos, los que mueven la lengua hacia los lados de la boca. Alrededor de los 6 a 7 meses, el empuje de la lengua comienza a desaparecer y, con algo de práctica, desarrollan nuevos trucos para descomponer la comida y moverla hacia atrás para tragar. En esta etapa, es muy común que los(as) bebés escupan alimentos que son demasiado grandes para tragar o que no mastican lo suficiente. Están aprendiendo, y esto es bueno para entrenar al/a bebé para que se sienta más cómodo comiendo.
Si tienes alguna preocupación acerca de cómo come o traga el/la bebé, programa una cita con el/la pediatra.
Cuando se trata de escupir la misma textura, es común y normal, como es normal, que algunos(as) niños(as) omitan gatear o sean menos atléticos o necesiten más tiempo para comenzar a leer (está bien, pero puede poner al/a bebé en una pequeña desventaja en el área de la salud o de vida y puede indicar que necesita un poco de apoyo). Es una respuesta normal, pero no ideal, y esa pequeña "preferencia" puede convertirse en un problema más específico con el tiempo. Como advertencia, algunos terapeutas tienden a describir esta preferencia como anormal, y a menudo asustan a los padres diciendo que puede indicar un trastorno del procesamiento sensorial. Sí, * puede ser * y también es un síntoma asociado con el autismo, pero por sí solo, no es realmente indicativo de nada y puede ser parte de las diferencias naturales del sistema nervioso de una persona, que pueden superarse a través del tiempo y con paciencia. Más sobre escupir aquí.
No. Los(as) bebés vienen en todas las formas y tamaños y con una amplia gama de apetitos. Nunca restrinjas la comida o la leche del/a bebé. En ocasiones, los(as) p/madres malinterpretan las señales de un(a) bebé como signos de hambre cuando pueden estar molesto(a) porque está aburrido(a), frustrado(a), cansado(a), etc. Está bien intentar otras formas de calmar al/a bebé, como mecer, cantar o jugar. Experimenta para ver si estas alternativas funcionan, pero siempre confía en tus instintos y en el/la bebé. Si tienes alguna preocupación al respecto del peso o el crecimiento del/a bebé, consulta con su pediatra.
La respuesta simple es no. En ocasiones, los(as) p/madres malinterpretan los llantos de un(a) bebé como señales de hambre cuando puede estar molesto(a) porque está aburrido(a), frustrado(a), cansado(a), etc. Está bien probar otras formas de calmar a tu bebé, como mecerlo(a), cantar o jugar. Experimenta para ver si estas alternativas funcionan, pero siempre confía en tus instintos y en tu bebé, y ofrece leche cuando el/la bebé esté interesado(a). Un(a) bebé rara vez comerá en exceso.
La deficiencia de hierro, que puede ser grave, es bastante común en bebés y niños(as) pequeños(as). Para ayudar a aumentar las reservas de hierro, sirve alimentos como carnes rojas, hígado, y sardinas. También se pueden servir fuentes de hierro de origen vegetal, como lentejas, y garbanzos; junto con alimentos ricos en vitamina C, como las fresas, para ayudar a la absorción de hierro.
¡No te preocupes! Es normal. Muchos(as) bebés, especialmente menores de 12 meses, no han desarrollado la destreza para agarrar la comida, por lo que, naturalmente, la comida cae al suelo a medida que aprenden a agarrarla. Después del primer cumpleaños, comienzan a aprender que pueden arrojar comida para afirmar su independencia o llamar tu atención. No reacciones negativamente; simplemente ofrécele la comida una vez mas, recordándole que "la comida se queda en la mesa". Si la vuelve a tirar, intenta aplicar un poco de disciplina amorosa: "Veo que estás tirando tu comida. Está bien, el desayuno se acabó. Tendremos más para comer a la hora de la merienda". Luego retira la comida. Durante esta etapa, si tienen perro en casa, considera sacarlo o ponerlo en otro cuarto durante la hora de comer para no tentar al bebe a tirar la comida en forma de juego. Lee más en nuestro artículo sobre arrojar la comida.
Es importante recordar que masticar es un comportamiento aprendido. Si bien es cierto que las personas adultas generalmente mastican la comida de manera más completa que los(as) bebés o niños(as) pequeños(as), esto no significa que los(as) niños(as) pequeños(as) no estén absorbiendo los nutrientes adecuados. No hay evidencia que sugiera que los(as) bebés que son alimentados siguiendo el método BLW o bocados para alimentarse solos pesen menos que los(as) bebés alimentados con cuchara, ni tienen un mayor riesgo de deficiencias nutricionales.(https://solidstarts.com/baby-led-weaning/faqs-baby-led-weaning/#easy-footnote-5-273)
Cuando un(a) bebé comienza su alimentación complementaria con bocados, el objetivo no es el consumo de alimentos sólidos, sino el desarrollo de las habilidades motoras orales y la exposición a una amplia gama de olores, texturas y sabores. La leche materna o la fórmula es la principal fuente de nutrición mientras los(as) bebés desarrollan estas habilidades.
Desarrollar las habilidades necesarias para masticar es muy parecido a desarrollar las habilidades necesarias para caminar. Cuando los(as) niños(as) aprenden a caminar, atraviesan una serie de hitos del desarrollo antes de caminar (ponerse de pie, caminar con apoyo y caer) antes de lograrlo. Cada uno de estos hitos es un componente importante para dominar la habilidad de caminar. Lo mismo ocurre con la masticación; no podemos esperar que un bebé o un niño pequeño sepa masticar sin practicar primero.
El sistema digestivo de un(a) bebé es increíblemente dinámico y pasa por varios cambios después del nacimiento y durante el primer año de vida y más adelante; sin embargo, aún no se comprende completamente.(https://solidstarts.com/baby-led-weaning/faqs-baby-led-weaning/#easy-footnote-6-273) En general, la digestión comienza en la boca, continúa en el estómago y el intestino delgado y concluye en el colon. No hay investigaciones que respalden que los(as) bebés o los(as) niños(as) pequeños(as) solo puedan digerir alimentos en forma de puré. Si bien se ha demostrado entre las personas adultas que los purés y las formaciones de jugo del mismo alimento se digieren más rápido que el mismo alimento en forma sólida, incluso cuando se mastican correctamente, esto no se traduce directamente en una mejor absorción o resultados nutricionales.(https://solidstarts.com/baby-led-weaning/faqs-baby-led-weaning/#easy-footnote-8-273)
Cuando un(a) bebé comienza a comer, con las manos en particular, ingiere una cantidad mínima de alimentos sólidos a medida que desarrolla sus habilidades motoras orales y sus necesidades nutricionales continúan siendo apoyadas por la leche materna y/o fórmula. Independientemente de cómo se introduzcan los alimentos sólidos (purés, bocados o una combinación de ambos), sabemos que esto desafía el sistema digestivo del/a bebé, como lo demuestra el cambio de color, olor y textura de la popó. Con este fin, los(as) cuidadores(as) no deben alarmarse instantáneamente si ven un pequeño trozo de zanahoria sin digerir, una cáscara de maíz o linaza en la popó del/a bebé, siempre que el/la bebé esté creciendo adecuadamente. Hasta la fecha, no hay investigaciones que sugieran que los(as) bebés que siguen el BLW o alimentación autorregulada tengan más probabilidades de experimentar síntomas que sugieran problemas digestivos, como aumento del reflujo, malestar abdominal, diarrea, alergias alimentarias o aumento de peso disminuido.
Puedes comenzar a usar especias para preparar la comida del/a bebé tan pronto como esté listo/a para comenzar a comer sólidos, lo que generalmente ocurre alrededor de los 6 meses de edad. No es necesario esperar: compartir los sabores que te gustan desde temprano y con frecuencia con tu bebé puede ayudar al/a niño/a a aceptarlos más adelante. Si las especias son picantes (como la pimienta de cayena, el chile en polvo o la pimienta de Szechuan), considera comenzar ofreciendo una pequeña cantidad al principio. El objetivo es crear una experiencia positiva con nuevos alimentos y sabores, y los platos muy condimentados pueden resultar un poco abrumadores para los nuevos comensales. Prueba la comida antes de servirla y, si te parece que está demasiado picante, ajusta los condimentos para suavizar el sabor. También puedes servir los alimentos condimentados junto con alimentos refrescantes como el aguacate, puré de papa o yogur. Sirve las comidas picantes junto con una pequeña cantidad de agua (o leche materna o fórmula) por si acaso el/lal bebé necesite algo de beber.
El apetito varía de un(a) bebé a otro(a). Es totalmente normal que los(as) bebés no coman una comida de vez en cuando. Cuando comienzan a consumir alimentos sólidos, algunos(as) bebés no entienden lo que se supone que deben hacer con la comida, y es natural que los padres y madres interpreten su comportamiento como desinterés por la comida. Intenta modelar y narrar: si tomas la comida y comienzas a comerla tú mismo(a), puede ser que el/la bebe siga tu ejemplo. A medida que avancen en su viaje con la alimentación, consulta con tu pediatra si tienes alguna inquietud sobre el peso o crecimiento del/a bebe.
Cuando los(as) bebés se frotan los ojos, puede ser una indicación de que simplemente están cansados(as) o, algo menos común, que sienten comezón debido a una reacción alérgica. Si crees que el horario de alimentación está bien y descartaste que tu bebé está cansado(a), échale un vistazo a nuestra página sobre síntomas de reacciones alérgicas y considera consultar con tu pediatra. Aunque puede ser difícil de ver, el desorden es en realidad una parte importante de aprender a comer. Los(as) bebés aprenden a través de la exploración, y ensuciarse con la comida es una de las muchas experiencias sensoriales importantes de las que aprenden. Finja indiferencia y trate de no reaccionar o enojarse, y evite limpiar a su bebé constantemente durante la comida, ya que esto puede hacer que el bebé asocie la alimentación con esta sensación a menudo negativa. Usar una jarra llena de agua tibia para lavarse las manos, los brazos, la cara, los pies y la parte inferior de las piernas después de cada comida puede hacer que la limpieza sea divertida. Consulte nuestro blog sobre Minimizar el desastre o mire nuestro video para obtener más estrategias. Por último, si el roce está causando irritación en la piel, considere consultar con el pediatra de su bebé para hablar sobre cualquier crema protectora para la piel que pueda ser beneficiosa.
Somos conscientes de la preocupación sobre el riesgo de propagar bacterias al compartir utensilios y comida con tu bebé o niño(A) pequeño(A), aunque descubrimos que muchos(as) p/madres siguen compartiendo utensilios y comida, incluso solo culturalmente. Vemos un suave equilibrio entre esterilidad y seguridad y la importancia de modelar y enseñar a un(a) bebé o niño(a) a alimentarse por sí mismo(a). Habiendo dicho esto, siempre alentamos a las familias a tomar esas decisiones basadas en lo que sea mejor para ellos(as), y a tener sus propias discusiones sobre los riesgos versus los beneficios con su pediatra e incluso con el/la dentista pediátrico.
Depende. El hipo puede ser muy angustiante para algunos(as) bebés y no ser gran cosa para otros(as). Debido a que el hipo puede distraer y ser molesto para algunos(as) bebés, puede ser mejor retirar la comida por un momento y tomar un descanso mientras el/la bebé tiene hipo. Para muchas personas, succionar y tragar o eructar puede ayudar a controlar el hipo, por lo que ofrecer un chupete, el pecho o un biberón, o darle palmaditas a la espalda del/a niño(a) puede ayudar a que el hipo desaparezca y luego puedan reanudar la comida. Si has continuado ofreciéndole comida al/a bebé mientras tiene hipo, no te preocupes: no existe una correlación basada en evidencia entre el hipo y el riesgo de ahogamiento, pero la recomendación más conservadora es hacer una pausa para que el/la bebé se recupere y luego volver a ofrecer la comida cuando el hipo ya se ha detenido para que no se distraiga mientras come.
Es un comportamiento común que los(as) bebés gruñan o pidan más, incluso cuando aún tienen comida en el plato. Si esto sucede con frecuencia, puedes cambiar cómo sirves la comida y dejar de servir las comidas estilo familiar. También podrías servirles un poco más si sientes que es apropiado, o simplemente llamar su atención de nuevo a la comida en su plato recogiendo los bocados para dárselos, o usando un utensilio, señalando, etc. Algunos(as) bebés quieren compartir la comida de tu plato también, así que puedes colocar un pedazo de tu plato en el del/a bebé si te sientes cómodo(a) con eso, o incluso agarrar un poco de la comida en el plato de tu bebé y darle mordidas para mostrar tu interés en su comida. Todo esto puede hacer que tu bebé se interese un poco más en lo que tiene frente a el/ella.
Comer en movimiento incrementa drásticamente el riesgo de ahogamiento y, por lo tanto, debe evitarse. Sabemos que a veces los refrigerios tienen que suceder en movimiento. Si ofreces refrigerios en el cochecito, espera hasta que el/la bebé tenga al menos 18 meses y solo ofrece alimentos con un bajo riesgo de ahogamiento. También asegúrate de acomodar el cochecito de manera que el bebé esté sentado erguido y no inclinado hacia atrás. Si alguna vez hubo un momento para las bolsitas de puré, este es el momento.
No. Los asientos de carro para bebe están en una posición reclinada que no es segura para que los bebés coman. Para empeorar las cosas, es difícil sacar rápidamente al bebé del asiento de carro para dar asistencia de emergencia cuando se está en un vehículo en movimiento.
Las mesas de destete de anidación o las mesas pequeñas hechas específicamente para niños(as) pequeños(as) pueden ser una excelente manera de desarrollar la independencia, proporcionar un lugar seguro para que un(a) niño(a) se siente para jugar y servir como un lugar apropiado para niños(as) mayores de 18 a 24 meses que ya entienden las reglas básicas de seguridad (es decir, la comida se queda en la mesa).
Si bien las mesas de destete son adecuadas y pueden ser seguras, también pueden evitar el modelado valioso que ocurre en la mesa familiar; considere reservar mesas para niños pequeños para la hora de la merienda y mantenga las comidas principales en la mesa familiar. Las oportunidades de sentarse de forma independiente durante el día pueden ser suficientes para que un niño trepador o que se mueve se siente feliz en su asiento durante las comidas familiares. Consulta nuestra guía de transiciones de sillas altas/tronas para un recurso más detallado.
En primer lugar, evita darle un nombre al comportamiento demasiado rápido. Muchos(as) niños(as) pequeños(as) se llevan la carne a la boca, la mastican brevemente y la escupen. Esto NO es una señal de que no les gusta. Dado que muchas carnes son difíciles de masticar, es más probable que sea una señal de que aún no tienen las habilidades o la resistencia para descomponer completamente la comida. Esto es especialmente cierto si ves la carne en la parte delantera de la boca y no se mueve hacia los molares o la parte posterior de la boca para que pueda masticarla bien. Ofrecer trozos grandes de carne puede ofrecer oportunidades al/a niño(a) para practicar dar mordidas y masticar una textura desafiante. Piensa en cosas como costillas enteras, muslos de pollo, chuletas de cordero con hueso, etc.
Si tu niño(a) pequeño(a) parece dudar hasta para en probar la carne, puedes intentar ofrecérsela en diferentes presentaciones: albóndigas, desmenuzada, en pedazos grandes y con el hueso, etc. También puedes agregar carne a platos como polenta, puré de papas o huevos revueltos, pero NO para ocultar la carne. Asegúrate de que tu niño(a) pequeño(a) sepa que está allí, porque no respetar la confianza del/a niño(a) podría empeorar el rechazo a la comida. Trata de ofrecer carnes temprano en el día, no después de un largo día de guardería/escuela o cuándo el/la niño(a) esté muy cansado(a). Y finalmente, piensa en crear situaciones en las que el hambre promueva la exploración: ofrece carne junto con otro alimento no preferido de vez en cuando y no ofrezcas alimentos de respaldo. No fuerces ni motives, pero recuérdale a tu hijo(a) que puede comer si tiene hambre, y si no, también está bien, habrá otra comida/refrigerio disponible en unas pocas horas. Si realmente es un desafío, consulta nuestra guía: 25 maneras de ayudar a los(as) niños(as) a probar las proteínas y las verduras para obtener muchas ideas.
La mejor práctica es utilizar un solo plato sin divisiones. ¿Los niños a quienes les sirven la comida en platos con divisiones se vuelven quisquillosos? No. Pero de manera general, mientras más pronto se sirva en un plato sin divisiones, mejor.
¿Listo(a) para más? Ve nuestro curso en video para comenzar la alimentación complementaria o consulta nuestro paquete completo para las primeras comidas.
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