Sugerencia de edades
6 meses
Alto contenido de hierro
No
Alérgeno común
No
El calabacín de verano se puede comenzar a ofrecer tan pronto como el/la bebé esté listo(a) para comer sólidos, lo cual es generalmente alrededor de los 6 meses de edad.
El calabacín de verano es una calabaza cosechada temprano mientras la piel es todavía delgada, las semillas son suaves y la carne es tierna. Se encuentran en diferentes colores- amarillas, verdes, blancas, con rayas y muchas más- y de diferentes formas, algunas son redondas y compactas y otras curvas y alargadas. La familia del calabacín tiene sus raíces en América Central, en donde los humanos las han cosechado para alimentación, para medicinas o para usos ceremoniales por al menos 10,000 años. Con el tiempo, su cultivo ha resultado en que hoy en día se encuentra en todos lados en diversas variedades como el calabacín de cuello torcido y de cuello recto, así como la calabaza, el chayote y el calabacín.
Sí. El calabacín de verano contiene una amplia variedad de nutrientes incluyendo carotenoides llamados luteína y zeaxantina que promueven una buena visión. Adicionalmente, es una buena fuente de vitamina C que ayuda a absorber el hierro de alimentos vegetales y betacaroteno que se convierte en vitamina A, un antioxidante que ayuda a la visión y al sistema inmune.Por último, el calabacín de verano contiene un poco de fibra, vitaminas B y colina. La piel contiene mas nutrientes que la carne, así que lava- pero no peles- el calabacín de verano antes de servirlo.
★Consejo: Guarda el calabacín de verano amarrado con soltura en el refrigerador para extender su vida útil. A diferencia del calabacín de invierno que tiene una piel dura, el calabacín de verano no se mantiene bien durante largos periodos de tiempo después de ser cosechado. Asegúrate de manejarlo con gentileza ya que cualquier daño puede acelerar el proceso de deterioro.
No. El calabacín de verano no es un alérgeno común, aunque cubos grandes o pedazos grandes de calabacín crudo puede ser un riesgo ya que es resbaloso y algo difícil de masticar. Habiendo dicho esto, en teoría, un individuo se puede ahogar con cualquier alimento. Para minimizar el riesgo, ofrece calabacín de verano cocido y córtalo en un tamaño apropiado para la edad. ¿Te preocupa la piel? En contra de lo que muchos piensan, la piel o cáscara de las frutas y verduras no representan un peligro de ahogamiento, aunque muchos bebes las escupen hasta que tienen la habilidad de deshacerlos con las muelas. La piel puede provocar arcadas inofensivas si se pega a la lengua del/la bebé. Como siempre, asegúrate de crear un entorno de alimentación seguro y mantente al alcance del/a bebé durante las comidas. Para obtener más información sobre ahogamiento, visita nuestra sección sobre arcadas y ahogamiento y familiarízate con la lista de peligros comunes de ahogamiento.
No. Si bien la información sobre las alergias al calabacín de verano es limitada, se han reportado algunos casos de alergias al calabacín, un pariente cercano del calabacín de verano. Las personas con alergias al calabacín pueden experimentar una reacción similar al comer calabacín de verano. Las personas con alergias al polen de ambrosía y/o a las hierbas pueden experimentar síntomas del síndrome de alergia oral (también llamada síndrome de alergia al polen) después de consumir calabacín o calabacín de verano crudos o ligeramente cocido. El síndrome de alergia oral, usualmente causa una sensación corta de comezón, hormigueo o ardor y es poco probable que resulte en una reacción peligrosa. Pelar y cocinar el calabacín de verano puede reducir el riesgo de reacción.
Como lo harías al introducir cualquier alimento nuevo, comienza ofreciendo una pequeña cantidad en las primeras porciones. Si no hay reacción adversa, aumenta gradualmente la cantidad durante las próximas comidas.
Guía recomendada: Introducción de alérgenos
Sí. El calabacín de verano tiene mucha agua así como pequeñas cantidades de fibra que ayudan a dar regularidad al sistema digestivo del/la bebé. Los(as) bebés menores de 12 meses generalmente consumen muchos líquidos gracias a la leche materna o a la formula. Sin embargo, conforme comienzan a comer más sólidos, los vegetales con alto contenido de agua – como el calabacín de verano- pueden ayudar a continuar hidratando el cuerpo del/la bebé y promover que hagan popo regularmente.
Los patrones de evacuación pueden cambiar de manera significativa de niño a niño, asegúrate de hablar con el pediatra o proveedor de salud si hay alguna preocupación sobre las evacuaciones de el/la bebé o sus funciones digestivas.
Cocinar el calabacín de verano en grasas saludables incrementa la habilidad del cuerpo de absorber algunos de sus nutrientes. Con este fin, intenta cocinar el calabacín de verano con un poco de aceite de oliva y sazonado con cítricos y hierbas. Para una comida más saludable, mezcla el calabacín de verano con carne molida, cebolla y papas para hacer picadillo o puedes probar un platillo vegetariano con calabacitas, una mezcla de maíz, pimientos y tomates que sabe delicioso solo o en tortilla. El calabacín de verano también queda muy bien en curry, sopas y estofados. Si que quieres simpleza, no te puedes equivocar con tiras de calabacín de verano al horno- una guarnición fácil para cualquier comida.
Cada bebé se desarrolla a su propio ritmo, y las sugerencias que ofrecemos sobre cómo cortar o preparar determinados alimentos son generalizaciones para una amplia audiencia.
Sirve el calabacín de verano cocido y cortado en lanzas, que tienden a ser fáciles de agarrar para el/la bebé. El calabacín de verano cocido puede ser resbaladizo, y si el/la bebé no pueden sostenerlo, intenta cubrirlos con nueces molidas, semillas de calabaza molidas o coco rallado para agregar agarre. Alternativamente, puedes mezclar calabacín de verano rallado, cocido o crudo en tortitas de frijol, tiras de huevo, albóndigas, panqueques o tamales. De cualquier manera, no hay necesidad de pelar el calabacín de verano. También puedes dejarle las semillas cocidas, ya que son muy suaves y no representan un riesgo de ahogamiento.
A esta edad, los(as) bebés desarrollan el agarre de pinza (en donde el dedo pulgar y el índice se juntan) lo que permite que puedan agarrar pedazos más pequeños de comida. Cuando veas signos de este desarrollo, intenta reducir el tamaño y ofrece calabacín de verano cocido y cortado en pedazos del tamaño de un bocado. Trata de no asustarte cuando veas que el/la bebé intenta meterse a la boca mucha comida: es normal a esta edad. Si prefieres, puedes rayar el calabacín de verano para minimizar el riesgo de ahogamiento. También puedes servir “zoodles”- espagueti que se simula al cortar el calabacín de verano en hebras finas.
A pesar de que el calabacín de verano rayado es delicioso en panes y panques, sigue ofreciendo el calabacín de verano en formas que no escondan el vegetal para que el/la niño(a) tenga familiaridad con el alimento completo. Sigue sirviendo pedazos del tamaño de un bocado y explora con sabores salados como jugo de cítricos, hierbas, especias y salsas. Promueve que el/la niño(a) se alimente solo con sus manos y si quieres fomentar el uso de cubiertos, puedes precargar la comida en cubiertos apropiados para la edad y dejarla junto a la comida para que el/la niño(a) lo pueda recoger solo. Trata de no hacer mucha presión- el uso consistente y preciso de los cubiertos, vendrá probablemente alrededor de los 18 a 24 meses de edad. También puedes considerar ofrecer el calabacín de verano crudo a esta edad. Ofrécelo en medias lunas delgadas o en palitos si estás confiado en la habilidad del/la niño(a) de masticar y cortar. Alrededor de los 18 meses, la mayoría de los/las bebés han practicado morder y cortar de manera consistente y es probable que tengan la habilidad de manejar rebanadas mas gruesas de calabacín de verano crudo (rodajas y medias lunas).
Ya sea en casa o en la guardería, obtén ideas de nuestra guía: 75 comidas para bebés y niños(as).
J. Truppi, MSN, CNS
V. Kalami, MNSP, RD, CSP
K. Tatiana Maldonado, MS, CCC-SLP, CBIS, CLEC
K. Grenawitzke, OTD, OTR/L, SCFES, IBCLC, CNT
Dr. S. Bajowala, MD, FAAAAI. Alergóloga e inmunóloga certificada por la Junta (sección de alergias)
Dr. R. Ruiz, MD, FAAP. Pediatra general certificada por la Junta y gastroenteróloga pediátrica
Consejos de expertos directo a tu bandeja de entrada
¡Suscríbete y recibe correos semanales con recetas, consejos y más!
Copyright © 2024 • Solid Starts Inc