Tapapecho

El pecho de res puede comenzar a ofrecerse tan pronto como el/la bebé esté listo/a para comenzar con sólidos, lo que generalmente es alrededor de los 6 meses de edad. Para obtener información sobre diferentes cortes y preparaciones de carne de res, visita carne molida y carne (bistec)

El pecho de res, falda, o tapapecho, es un corte de la parte delantera de la vaca. Una pechuga entera contiene dos porciones de carne separadas por una capa de grasa, aunque a menudo se vende en cortes: el corte plano, también llamado primer corte, y el segundo corte. El corte plano es más delgado, mientras que el segundo corte tiene más grasa. Ambos cortes son naturalmente duros y cientos de años de experimentación culinaria han dado como resultado una variedad de métodos de preparación que dan como resultado una carne tan blanda que “se deshace”. El pecho se puede preparar como estofado, hervir, asar a la parrilla, ahumar o guisar, y se usa en todas las culturas, incluyendo el barbecue del sur de Estados Unidos, la carne en conserva del Reino Unido, los asados ​​de Europa del Este y el phở de Vietnam. 

Sí. El pecho es rico en proteínas y grasas, además de hierro, zinc, selenio, colina y vitamina B6. Juntos, estos nutrientes apoyan el crecimiento, el desarrollo del cerebro, los glóbulos rojos sanos, la percepción del gusto, la salud inmunológica, la función hormonal, los procesos metabólicos, y proveen energía para jugar y explorar, y más. Los bebés necesitan cantidades cada vez mayores de hierro a partir de los 6 meses, cuando sus reservas se agotan, y el pecho de res ofrece una gran fuente de hierro dietético en esta etapa de la vida del bebé.

Sí. La carne es una de las causas más comunes de ahogamiento, así que es importante asegurarse de prepararla de manera apropiada para la edad y habilidades de cada niño/a. Para minimizar el riesgo, desmenuza o pica la pechuga finamente antes de servirla a tu bebé. Considera que a veces la carne puede moverse muy despacio por el esófago (el tubo digestivo), lo que puede causar ansiedad. Si bien es algo incómodo, la persona aún puede respirar cuando esto está sucediendo. Si crees que un pedazo de comida está causando molestias en el esófago (el/la niño/a puede estar llorando y teniendo dificultades para tragar), ofrécele un sorbo de agua con un vaso de popote, vaso abierto, biberón o una toma de lactancia y si eso no logra aliviar la situación, llama a los servicios de emergencia. Como siempre, asegúrate de crear un entorno seguro para comer y manténte siempre cerca de tu bebé durante las comidas. Para obtener más detalles sobre el ahogamiento, visita arcadas y ahogamiento y familiarízate con la lista de peligros comunes de ahogamiento.

No. La carne de res no es un alérgeno común, aunque sí se han reportado casos de reacciones alérgicas. Las mordidas de ciertas garrapatas (principalmente las garrapatas Lone Star, que se encuentran en la superficie continental de los Estados Unidos, pero también otras garrapatas alrededor del mundo), están asociadas con el desarrollo de una alergia a la galactosa alpha-1 galactosa-3 (también conocida como “alpha gal”), la cual es una azúcar que se presenta en la carne de los mamíferos no primates. Esto resulta en una reacción alérgica retardada, entre 3 y 8 horas después de consumir cualquier carne roja, incluyendo la carne de res. Sin embargo, algunos individuos con la alergia alpha gal también desarrollan una reacción a las pequeñas cantidades de azúcar presentes en los productos lácteos, en la gelatina o en los tejidos de los órganos (como el hígado) de los mamíferos. La alergia alpha gal es más frecuente en el sureste de los Estados Unidos pero está comenzando a ser más común en otras áreas en donde la población de la garrapata Lone Star se está expandiendo. Aunque es poco común, los individuos con una alergia a los lácteos pueden tener un riesgo un poco más alto de ser sensibles a la carne de res. Sin embargo, hay estudios que demuestran que un gran porcentaje de los individuos con una alergia confirmada a la carne de res, también tienen una alergia a la leche de vaca.

Como lo harías al introducir cualquier alimento nuevo, comienza ofreciendo una pequeña cantidad en las primeras porciones y observa con cuidado conforme el/la bebé come. Si no hay reacción adversa, aumenta gradualmente la cantidad durante las próximas comidas.

Not regularly, but it’s okay for baby to have a tiny taste once in a while if you want to share your meal. Smoking meats can introduce carcinogenic compounds to food. If you’d like to share brisket regularly with baby, go with a recipe that does not involve smoking the meat.

No. Beef tends to be relatively rich in fat and low in fiber, qualities that slow the processes of digestion and pooping. If baby is constipated, it’s best to offer foods rich in fiber. Remember that pooping patterns can vary significantly from baby to baby. If you have concerns about baby’s pooping and digestive function, talk to your pediatric healthcare provider.