Sugerencia de edades
6 meses
Alto contenido de hierro
No
Alérgeno común
No
El perejil fresco o seco, se puede introducir a la dieta del bebé tan pronto como esté listo para comer sólidos, que generalmente es alrededor de los 6 meses de edad.
Nunca le des aceite esencial o extractos de perejil a los(as) bebés. Estos productos pueden ser tóxicos debido a sus altas concentraciones de ciertos químicos vegetales que son perfectamente seguros cuando se consumen en el alimento entero.
El perejil se originó en las tierras fértiles alrededor del Mar Mediterráneo, donde se ha comido como alimento y se ha utilizado en prácticas ceremoniales desde la antigüedad. Al igual que el cilantro, toda la planta del perejil es comestible. Las hojas crudas se usan como guarnición o condimento, y las semillas se secan para hacer especias. Además, las raíces parecen chirivías, y se pueden tratar de manera similar en la cocina. Las hojas se utilizan en platillos de todo el mundo: desde salsas verdes como el chimichurri, la gremolata y el persillade, a guisos como el coq au vin, el gumbo z'herbes y el ghormeh sabzi, hasta ensaladas de hierbas como el fattoush y el tabbouleh. Los dos tipos de perejil más populares, el de hoja rizada y el de hoja plana, se pueden usar indistintamente en la cocina, aunque el perejil de hoja plana tiene un sabor más fuerte.
Sí, aunque los beneficios nutricionales del perejil son limitados porque la hierba se usa a menudo en cantidades pequeñas. Las hojas de perejil contienen carotenoides, nutrientes como el betacaroteno, la luteína y la zeaxantina, que promueven una visión saludable. Los bebés también pueden beneficiarse de la vitamina K y la vitamina C del perejil, que ayudan a construir huesos sólidos y tejido sano. El perejil contiene pequeñas cantidades de calcio y hierro, así como un compuesto llamado apigenina, que ha sido estudiado por sus propiedades antiinflamatorias y anticancerígenas.
Nunca se debe administrar aceite esencial o extractos de perejil a los(as) bebés. Estos productos pueden ser tóxicos, debido a sus altas concentraciones de ciertos químicos vegetales que son perfectamente seguros cuando se consumen en el alimento entero.
★Consejo: Enjuaga bien el perejil antes de usarlo, ya que las hojas pueden tener tierra o suciedad de la cosecha. El perejil también es muy perecedero, así que úsalo en seguida después de comprarlo. Si te sobra perejil, envuélvelo en una toalla húmeda y guárdalo en una bolsa sellada en el refrigerador. También puedes mezclarlo con un poco de aceite de oliva y congelarlo en bandejas de hielo para usarlo después. También puedes poner las hojas lavadas y secas en una bolsa de congelador, eliminando la mayor cantidad de aire posible y enrollando la bolsa firmemente antes de colocarla en el congelador.
No. Cuando se corta finamente, el perejil no debe representar ningún riesgo significativo, aunque sus hojas y pedacitos pueden pegarse a la lengua y al paladar del bebé y causar arcadas y tos. Si esto sucede, ofrécele al bebé una bebida en un vaso abierto para ayudarle a enjuagar la hoja pegada. Beber de un vaso abierto (en lugar de un vaso con popote) tiende a ser más útil en estas situaciones. Como siempre, asegúrate de crear un ambiente de alimentación seguro y mantén al bebé al alcance de tu mano. Para obtener más información sobre el ahogamiento, visita nuestras secciones sobre arcadas y ahogamiento y familiarízate con la lista de peligros comunes de ahogamiento.
No. Las alergias al perejil son poco frecuentes, aunque se han reportado reacciones anafilácticas y dermatitis de contacto. Las personas que son alérgicas al polen de la artemisa o los abedules o que tienen Síndrome de Alergia Oral (también llamado síndrome de alergia polen-alimento) también pueden ser sensibles al perejil. El Síndrome de Alergia Oral suele provocar picazón, hormigueo o ardor en la boca de corta duración y es poco probable que provoque una reacción peligrosa.
Aunque no es común, el perejil también es una causa conocida de fitodermatitis, una erupción no alérgica que se produce después de que la piel que ha entrado en contacto con el perejil se expone a la luz UV. Se recomienda lavarse bien las manos y los antebrazos después de manipular o cortar perejil crudo.
Como lo harías al introducir cualquier alimento nuevo, comienza ofreciendo una pequeña cantidad en las primeras porciones. Si no hay reacción adversa alguna, aumenta gradualmente la cantidad durante las próximas comidas.
Guía Recomendada: Cómo Introducir Alérgenos
Guía recomendada: Introducción de alérgenos
Debido a que el perejil se usa a menudo en pequeñas cantidades, sus efectos relacionados con las heces son mínimos. El consumir perejil en grandes cantidades, como en platillos como el tabulé, puede ayudar a movilizar las heces.
El perejil agrega un sabor brillante a los alimentos de la misma manera que un chorrito de jugo de limón equilibra un plato. La planta tiene un sabor herbáceo con un sabor ligeramente amargo que funciona bien con alimentos cremosos como puré de papas, queso ricota o huevos revueltos. Sin embargo no pienses en el perejil solo como guarnición. Prueba las hojas de perejil en tu próxima ensalada o batido. Agrega perejil al aceite y vinagre para hacer una marinada para frijoles, lentejas, granos o champiñones. Mezcla perejil en las albóndigas, las tortitas de salmón o las hamburguesas vegetarianas. ¿Tienes tiempo limitado para cocinar? No puedes equivocarte con una combinacion de perejil, ajo, jugo de limón y aceite de oliva para preparar una salsa clásica que sabe deliciosa con carnes asadas y verduras: el chimichurri.
Cada bebé se desarrolla a su propio ritmo, y las sugerencias que ofrecemos sobre cómo cortar o preparar determinados alimentos son generalizaciones para una amplia audiencia.
Mezcla el perejil fresco con aceite y un poco de jugo cítrico para una salsa que se puede rociar sobre verduras al vapor, pollo guisado o pescado escalfado. También puedes picar el perejil finamente para combinarlo con alimentos blandos que se puedan recoger con la mano, como puré de verduras, arroz o yogur. Exponer al bebé a pedacitos de hierbas verdes desde el principio ayuda a aclimatarlo a los alimentos verdes y a los alimentos con los que son mezclados.
Incorpora perejil finamente picado en salsas, empanadas de carne y lentejas, o espolvoréalo sobre platos de frijoles y verduras al vapor. Y por supuesto, continúa usando perejil para hacer salsas verdes para sazonar la comida del bebé.
Usa perejil como lo harías normalmente en los platillos, incluso si una receta requiere hojas enteras de perejil. Solo ten en cuenta que cualquier hoja más grande puede causar que los(as) niños(as) pequeños(as) tengan arcadas o tosan un poco. Mantén una taza abierta con agua o leche a la mano y anima al niño(a) a tomar un sorbo si un poco de perejil se siente incómodo.
Explora recetas para toda la familia que son seguras para los(as) bebés con nuestra guía, 100 Cenas para Bebés y Niños pequeños.
E. Cerda, MSN, CNS, LDN
A. Gilbaugh, RD, CNSC
K. Grenawitzke, OTD, OTR/L, SCFES, IBCLC, CNT
Dr. S. Bajowala, MD, FAAAAI. Board-Certified Allergist & Immunologist (allergy section)
Dr. R. Ruiz, MD, FAAP. Board-Certified General Pediatrician & Pediatric Gastroenterologist
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